jueves, 24 de septiembre de 2009

Piiiiiiiiiiiiiiiiiiizza

Hoy estreno diseño del blog hecho por mí a mí gusto :), lo único que es un poco molesto es que cada que se borran casi todos mis widgets, pero ps ya qué.

Además hoy les voy a presumir lo que aprendí a preparar el domingo pasado y que quedó super deli deli, hasta más que cualquiera de esas populares y/o comerciales, vean nomás:

Creo que ya se me antojó, igual y para el fin me espera otra juju. Hablando de comestibles, hoy probé una paleta de Bubaloo de fresa-mora azul que tenía un polvito de uva adentro, ¡la recomiendo ampliamente! Y si tienen chance, sacaron unas oreos cuyo relleno es de banana, van a estar por tiempo limitado, así que sugiero que si son fans, las prueben lo antes posible.

¿Mi próximo objetivo? ¡Sushi porsupuesto!

viernes, 18 de septiembre de 2009

Árbol que nace torcido...

Las personas jamás cambiaremos nuestra escencia, nuestra personalidad, esos rasgos que nos hace ser únicos. La gente lo que puede modificar y/o mejorar son hábitos, apariencia, ciertas características de su carácter o simplemente se adaptan; y si bien es cierto, las circunstancias, golpes o experiencias de la vida también pueden causar alguna modificación, pero no cambiar en lo que a rasgos principales de personalidad de un individuo se trata.

Sí creo que la gente puede cambiar algún aspecto que no le guste, si es que lo acepta, se lo propone y esta dispuesta a ello, y ahí ya se entra una cuestión que es la madurez.
Sin embargo, nunca debemos esperar con o sin anhelo que cambie una persona, mucho menos intentar cambiarla; si le estimamos debemos apreciarla tal y como es y si no nos conviene dejarla ir o buscar una salida, y en el caso de que tenga alguna característica que no te guste, si tienes la confianza con la persona, informarsela para que sepa, pero esa persona es única la que tomará la decisión si se reformará en ese aspecto o no. No debemos exigirle que cambie, si la persona en cuestión es feliz con esas características personales de las que hablamos, ¿para qué cambiar? eso supone un esfuerzo, mucho más grande de lo que pensamos. Y si no lo es, esa persona se dará cuenta e intentará hacer algo al respecto.

Tampoco todas las personas "cambian" para bien, hay quienes lo hacen para mal. Y nunca uno debe pretender ser quien no es para agradar a los demás. Y si a una persona desde un principio le agradaste tal y como eres y de repente le dejas de agradar, como que no tiene sentido. Siendo sinceros, si a una persona le gusta algo, ese algo siempre le gustará aunque haya encontrado nuevas cosas que le llamen la atención o le gusten.

Lo primero a tener en cuenta es que para que una persona cambie, el primero que debe desear ese cambio es esa persona, así que por mucho que los demás lo deseen, es una cuestión muy personal en la que confluyen la voluntad y la fuerza.… y no servirá de mucho si la propia persona no se lo propone. Así que… a esperar sentado si queremos que alguien cambie.

Aunque personalmente, yo no diría que una persona "cambia" necesariamente, sino que se va más bien evolucionando y desarrollando, ya sea para mejor o para peor, con los aprendizajes de la escuela de la vida.

Todo evoluciona, todo se adapta al cambio, todo obedece a una razón, por lo tanto no existe nada más evolucionado o menos evolucionado, ni mucho menos la devolución (involución para que no suene a bodega), el mundo gira y la vida sigue su curso y eso significa cambios, si algo aparentemente esta como esta hace miles de años, es porque el cambio no es necesario, perceptible u obvio. Nadie dijo tampoco que sea fácil, o que incluso no llegue a implicar esfuerzo, pero querer es poder.

"Quien pretenda una felicidad y sabiduría constantes, deverá acomodarse a frecuentes cambios".
Confucio

jueves, 17 de septiembre de 2009

Más allá de los sueños

Cada uno vive con su soga al cuello,
y todos tenemos nuestros miedos.
De nosotros depende apretar más o menos.

No vivas ahorcado con tus sueños,
sueña que convives con tu soga al cuello.

Muchos querrán tirarte tan fuerte,
que desearán separar tu cabeza del cuerpo,
y ese… ese será su sueño.

Otros en cambio, viven soñando,
y viven sus sueños,
porque son capaces de llevárselos.

Y la espera merecerá la pena,
la soga será etérea,
y tu vida resurgirá de las tinieblas.

Sueña, que el mundo necesita tus sueños.
Y llévatelos más allá de los sueños.

lunes, 14 de septiembre de 2009

Sol brillante

Ahora que despertaste, todo se ve tan diferente...
Miro hacia mi alrededor, pero no hay nada.
Me pongo mis zapatos y entonces te encuentro aún en pijamas
Entonces encontré en un sueño, que me colgaba de un anticlímax.
Estas con el sol y está aquí afuera... ¿Pero dónde estoy yo?

Yo me fuí de viaje y vagué por las calles...
No puedo hallar la forma de salir, por lo tanto uso las estrellas.
Te sientas por la eternidad y luego te vas.
Eres el sol que brilla intensamente, así que sal.

Me despierto de una pesadilla, mi corazón late fuera de control.
Me he acostumbrado tanto a esta locura que ya se ha vuelto forzada.
Y tú estás aquí, estoy sintiendo que tú estás aquí, sol brillante.

Cogito ergo sum

Ultimamente he tenido pensamientos que podrían catalogarse tal vez como demasiado "randoms", me hace gracia que mi mamá me dijo en alguna ocasión que terminaría como Hemingway de tanto pensar (de broma, claro). Como nota cultural, aunque no se sabe a ciencia cierta, Hemingway se suicidó porque no le encontró sentido a la vida.
No, yo no pienso en esas clase de cosas, yo creo que la vida sí tiene sentido y debe disfrutarse lo más posible. Pensar puede ser bueno porque te ayuda a entender ciertas cuestiones, pero puede ser contraproducente si no puedes lograr comprender algo a lo que le das vueltas a tu cabeza. En esos casos, realmente es mejor ni siquiera pensar. A veces envidio a la gente que no piensa y solo actúa... aunque no estoy segura si eso sería algo que personalmente recomendaría.

Justo en este instante, me vino a la mente el popular dicho de Descartes "Cogito ergo sum", que vendría siendo "Pienso, luego existo". Es un dicho muy curioso si lo analizas detenidamente. Al menos de la forma que yo interpreto esta frase, es que, logicamente te das cuenta de que existes porque eres capaz de pensar, razonar y ser conciente. Sin duda son tres simples palabras que resumen un profundo análisis entre la relación del cuerpo y la mente.

Puede ser que ponga en debate si se debe de pensar con el cerebro y actuar con el corazón o viceversa. Hasta ahora en mi día a día, he tratado de alinear los pros y contras de cada situación para saber de que manera proceder. No ha sido siempre una regla, nunca lo será, pues no en todas las ocasiones puedes tener la cabeza fría, lo cual es muy humano.

En este mundo habemos los que somos mas racionales, que somos los que meditamos más antes de obrar y los sentimentales que se dejan guíar más por sus emociones practicamente. No creo que exista un punto intermedio o un balance entre ambas, sino que son pues como tendencias que parten de la forma de ser de cada persona; con esto tampoco quiero decir que los racionales no tengan sentimientos o que los sentimentales no piensan o son irracionales, es absurdo, porque entonces no seríamos humanos.

Sería una gran tontería decir o creer que los racionales somos personas frías y por ello no sentimos, que quede claro, ese es un estereotipo vanal. Como persona racional que me considero, sucede que aunque nos tiren las situaciones difíciles o dolorosas, lo resentimos como cualquier otra persona y muy posiblemente en nuestra soledad o con alguien de confianza lo manifestemos; lo que pasa es que como ente más racional, meditamos cuidadosamente la situación que estamos sufriendo, si de verdad es algo por lo que realmente vale la pena estar mal y nos levantamos viendo todo desde una perspectiva positiva. No nos estancamos, no nos quedamos tirados, intentamos con el poder psicológico derrotar el dolor, o la ira o el coraje que nos invade el alma, porque al fin y al cabo, yo por lo menos si tengo fe en dichos como "no hay mal que por bien no venga", "todo tiene solución menos la muerte", "todo pasa por alguna razón".

Y reitero, la vida es una y hay que disfrutarla no vivirla amargosamente, y si uno mismo no se quiere ¿quien más lo hará?. Por eso, superar una dificultad tiene mucho que ver con como sea tu visión de la vida, con tu autoestima y tu seguridad como persona.

A mi no me gusta que me afecten cosas negativas y más si son trivialidades, si algo me duele lo sufro, lloró y medito el rato que sea necesario hasta que sienta que ya no me duele y vea las cosas de mejor forma y ya... Show must go on.
Al contar con suficiente amor propio, este hace que generalmente no te lástime nadie ni te hagan sentir mal o inferior, y si te lástiman pasas el trago lo más rapido posible y a otra cosa mariposa. Jamás se debe uno desvalorar como persona.

Es un poco molesto que exista gente que piense que soy una "dura" o que me vale algo, simplemente porque yo decido disfrutar la vida y me ven feliz y no estoy ahi tirada llorandole mis penas al mundo y pensando que ya nada vale la pena en la vida. Eso me parece patético, al mal tiempo hay que darle buena cara.
Prefiero que me vean como "strong independent woman" y feliz millones de veces, a que me vean con lástima. Eso ni siquiera tendría que pensarlo dos veces. Pero no se le puede dar gusto a nadie, si estas bien, mal, si estas mal, mal. Por eso, yo decido lo que quiero ser y si el resto tiene problemas con que yo decida ser feliz, pues es problema de los demás. Y que fluya la vida.

Asi que dejemos los estereotipos, es fácil crearse falsas ideas de las personas por culpa de ellos, una persona racional no tiene por que ser indiferente, también creo que la sensibilidad parte de entender lo que siente el otro, y que esa sensibilidad no obedece a una ideología sino a la experiencia emocional que hemos tenido en nuestras vidas. No veo objeto el separar el raciocinio de la espiritualidad, ya que ambas cosas son partes intrínsecas en el ser humano.

And I get a nosebleed, but I'll always stand up again.

jueves, 10 de septiembre de 2009

Blablabla

En lo personal y aunque no es precisamente agradable, jamás le he dado mayor importancia cuando una persona que no es parte de mi vida habla mal de mi a mis espaldas, puesto que sólo son personas que pre-juzgan sin siquiera conocerte o no te conocen "lo suficiente". Al fín y al cabo, los que de verdad te conocen, saben cómo eres y te aprecian como tal, con tus defectos y cualidades, y saben qué tanto puede ser cierto de lo que dicen otros y qué son solo chismes o inventos. Mejor dejarlo pasar... ¿para qué hacerse líos con gente chismosa?

Que hablen mal de uno es muy normal, todos lo hemos hecho incluso, pues tenemos que aceptar que nadie es monedita de oro para caerle bien a todos. Lo que no es justo es que cuando lo hacen con un afán continúo y destructivo cuando tu a esas personas no les haz hecho nunca nada malo, esa gente siempre me molestará, pero gracias a Dios siempre hay gente que te va a apoyar.

Pero es peor si te enteras que es un "amigo" el que habla mal de tí, porque te das cuenta de que realmente esa persona no era tu "amigo" ya que si realmente lo fuera, te diría las cosas a la cara y no a tus espaldas con los demás, metiendo cizañas. Duele y/o da mucho coraje de cierta manera y a ciertos grados, por supuesto, pero ahí es donde esta la prueba y te jactas, y si alguien que te aprecia se deja influenciar de alguna manera por lo que otros dicen negativamente de uno, entonces, esa persona no es digna ni merecedora de tenerlo cerca, pues no te valoró y sólo se dejó llevar por habladurías.

Motivos por los que alguien habla mal pueden ser tantos, como envidia, porque no son capaces de asimilar el concepto de tolerancia, etc.

Lo que importa al final, es darse a respetar y el criterio que tengan de tí las personas que han demostrado que de verdad te quieren, y por ende esas personas son las que de verdad te conocen "lo suficiente" para tener sus propios juicios y no dejarse llevar por los juicios de otros que generalmente, no tienen ni la más remota idea.

Sí, vivimos en un mundo repleto de hipocresías, falsedades, en el que debemos desconfiar y en donde las verdaderas amistades se cuentan con los dedos y sobran. Y para estas personas que se dedican a difamar "no hay mayor desprecio que el no prestar aprecio". Total, todo tarde o temprano se devuelve en esta vida.

Así que concluyo con mi propia reflexión, uno se debe preocupar única y exclusivamente de lo que piense la gente que te quiere y es gente que te conoce bien y te dice las cosas a la cara al igual que uno lo debe hacer; lo que diga el resto se desecha y que no te afecte, en resumen, que te valga madres, pues no es problema de uno. Ahora si que, tomar las cosas como de quien vienen. Y los que se dejen influenciar por habladurias, pues no valen la pena.

Igual en mi caso, siempre me porto, portaré y me seguire portando de manera correcta y a la altura con la gente que me rodea, y es lo que se debe hacer, la vida no se vive para amargarse por culpa de otros. Nadie es mejor ni peor ni imperfecto, sólo diferentes, todos con defectos y virtudes.

"Que hablen mal de uno es espantoso, pero hay algo peor: que no hablen".
Oscar Wilde